Estuve en un colegio de verano dentro del proyecto Euro 2016 de voluntariado europeo de corta duración, con unos 24 niños de 3 a 5 años en mi grupo (había unos 100 niños en total). Las actividades eran muy limitadas dada la corta edad de los niños, pues ni entienden las reglas de muchos juegos, ni puedes hacer grandes actividades con ellos. La temática de la escuela era la naturaleza, por lo que las actividades giraban en torno a eso, y también tuvimos alguna salida corta, la mayor fue al parque de atracciones. Lo positivo de ser tan pequeños es que ellos mismos están aprendiendo a hablar, por lo que podemos aprender francés juntos, y la mayor parte del tiempo quieren jugar o hacer cosas básicas (como dormir o simplemente cariño) y no necesitas hablar demasiado.
Al margen de las actividades la experiencia fue positiva, pues convivimos unos 12 voluntarios de diferentes países en la misma residencia, y viajamos bastante durante nuestros fines de semana y nuestro tiempo libre.
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